En Alifbay había una ciudad tan triste que sus habitantes olvidaron su nombre. Todos vivían hundidos en la tristeza, la cual incluso se producía en fábricas con grandes chimeneas humeantes al norte del poblado. Sólo la familia del cuenta cuentos Rashid Khalifa, el Shah de Blah, conservaba una chispa de felicidad. Hasta que un día su hijo Haroun escuchó una pregunta que lo arruinó todo: ¿De qué sirven todas esas historias que ni siquiera son ciertas?
“Haroun y el mar de historias” es un libro para niños no tan niños. Al estilo de “Alicia en el país de las maravillas”, o incluso de “Harry Potter”, se trata de un relato que rompe esquemas. En él, Rushdie cuenta las aventuras fantásticas que vive Haroun en Kahani, un satélite de
Debo hacer una confesión: con muy valiosas excepciones, yo no disfruto particularmente los cuentos para niños. Pero con éste me pasó algo extraño. Cada vez que el argumento empezaba a cansarme, Rushdie me sonreía con alguna referencia a los Beatles, a “El señor de los anillos”, a “El mago de Oz” y a “Las mil y una noches”. Y yo le devolvía la sonrisa.
1 comentario:
Suena perfecto. Va mi lista de inmediato. O lo que es lo m-iz-mo, a ese viajecito yo sí me embarco y quiero comprar boleto :)
Saludos. Al rato te dejo comentario en el Garage...
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